En este artículo:
- El año escolar está justo a la vuelta de la esquina. Antes de que sus hijos regresen a la escuela, con tiempo, comience a acostumbrarlos poco a poco a su rutina escolar. Es decir, procurar que se acuesten a dormir más temprano, evitar que seguido se levanten tarde y limitar el tiempo que pasan frente a una pantalla.
- Lleve a su hijo al médico tanto para una revisión general como para recibir vacunas. Además, llévelo con el optometrista para asegurarse de que pueda leer claramente el texto pequeño y lejano.
- Además, busque una mochila cómoda para su hijo, anímelo a lavarse las manos durante el día y envíelo a la escuela con un desayuno nutritivo que le llene.
Su equipo administrativo de alguna manera ha desarrollado una cultura por todo el Centro de Quemaduras de Arizona que es algo por lo que yo los quería felicitar… Es una cultura donde tratan al paciente como una persona especial. Ya sea el personal de enfermería, los terapeutas físicos o los médicos, todos compartían ese mismo entendimiento de la importancia del paciente y cómo otorgar la mejor atención médica integral posible.—
1. Regrese poco a poco a la rutina del año escolar
Durante el verano, cuando no hay clases al día siguiente, es fácil permitirles a sus hijos quedarse despiertos hasta tarde. Por lo menos una semana antes del primer día de clases, empiece a exigirles que se acuesten temprano y que apaguen los aparatos electrónicos en la noche. Los pediatras recomiendan de 9 a 12 horas de sueño por noche para los niños de 6 a 12 años y de 8 a 10 horas por noche para los adolescentes.
2. Llévelos al médico
El verano es la temporada perfecta para programar citas con el pediatra de sus hijos tanto para un examen de bienestar anual como para asegurase de que estén al día con las vacunas. Si su estudiante practica algún deporte es muy probable que necesite una revisión física. Haga una cita con su proveedor de Valleywise Health al llamar al 602-344-2777.
3. Llévelos a una revisión de la vista
Asegurarse de que su niño/a pueda ver el pizarrón en el salón es crucial para el éxito escolar. Muchos niños no saben cómo explicar que su visión está borrosa, así que antes de que empiece la escuela visite al optometrista para saber si su hijo/a necesita lentes.
4. Encuéntreles la mochila perfecta
Los libros pueden llegar a pesar mucho y sin los accesorios correctos, con el tiempo, pueden causarle a su hijo/a una lesión en el cuello, los hombros y la espalda. Si la escuela las permite, las mochilas con ruedas pueden ser una buena solución. De lo contrario, asegúrese de que la mochila le ajuste bien a su hijo y que tenga tirantes acolchados que se puedan aflojar o apretar. Recuérdeles usar ambos tirantes y no colgarse la mochila de un solo brazo.
5. Practique buena higiene
La escuela es un lugar mágico, pero, aunque la limpien muy bien, siempre va a estar llena de gérmenes. Anime a sus hijos a que se laven bien las manos con agua y jabón durante el transcurso del día. Es la mejor manera de evitar contraer y propagar enfermedades, lo cual puede significar menos días de enfermedad tanto para su hijo/a como para usted.
6. Deje que los alimentos sean su medicina
Enviar a sus niños a la escuela con un desayuno, merienda y almuerzo saludable les ayudará a estar más atentos en clase y les irá mejor en general. Proporcione opciones de comidas saludables a diario para fomentar buenos hábitos alimenticios desde una edad temprana.